En lo que se refiere a los 'showrooms', la frase 'la primera impresión es la que cuenta' deja de ser un simple cliché para volverse una verdad absoluta.
Es más, explica el Arq. Fernando Almeida, la buena o mala decoración de un local puede decidir el éxito o el fracaso de un almacén. Si la tienda no despierta el interés, el negocio está en problemas.
En el diseño de locales comerciales, explica Rodney Verdezoto, hay parámetros tan importantes como el valor estético, funcional y ergonómico; el uso de materiales o la aplicación del color. Son las nuevas estrategias de 'merchandising', las cuales ayudan a que el local diseñado dé resultados positivos en ventas.
Estas estrategias se aplican tanto en las vitrinas y rotulación, como en los espacios interiores, en donde la distribución conceptual del producto, el equilibrio en el manejo de la luz y el soporte a través de imágenes y video dan un alto valor agregado, explica Verdezoto.
No menos importante es el valor del personal de atención con una imagen de soporte a la marca, que es el complemento perfecto para que un local justifique económicamente su inversión, aclara Verdezoto.
La distribución espacial -incluidos espacios vacíos, estanterías y mobiliario- es esencial en el diseño interior de un showroom. Para el Arq. Ígor Muñoz fue una determinante en el rediseño de Zientte by Dejavu de Cumbayá.
La propuesta logró crear espacios amplios interconectados, que permiten una diafanidad espacial y una idónea iluminación natural. Se aprovecharon los grandes ventanales de la casa de 800 m² para convertirlos en vitrinas que muestran los objetos en su verdadera dimensión.
En Mundomac del paseo San Francisco, Verdezoto privilegió el uso de colores en los espacios interiores para dar equilibrio, gran atracción y generar zonas de impacto visual con iluminación luz de día.
A esto le acompañó un manejo superorganizado de la distribución del producto balanceando colores y proporciones de los mismos.
En Demócrata, Verdezoto buscó un concepto que trasmita el valor agregado que genera el diseño de los zapatos. Por eso privilegió los tonos tierra, la luz cálida, el equilibrio de espacios, la distribución minimalista y el soporte con gigantografías alusivas.
